Capítulo VIII [ Parte 2] Toda la lucha que pensamos que era en vano.


  • ¿Sabes quién es? – repito lo ya obvio tratando de que mi cerebro encuentre alguna idea rápida, estaba en blanco totalmente.
  • He tenido hoy un afable encuentro con vuestro amigo y su banda Tokio Hotel – dijo bastante serena – ahora tío para que relajes vuestra expresión facial tengo que decirte a que me dedico.
  • ¡Bien, sí! Sería… una buena idea – digo más que nervioso, en cuanto tuviera a Georg en frente lo patearía duramente en el trasero.
  • Soy reportera para la revista Bravo – ¡Santa madre de Dios! Fue lo primero que me cruzó por la cabeza y enseguida abrí lo más que puede mis ojos por tal revelación, esto iba a ponerse complicado – sí, os hubiera dicho antes, creo que los tres no estaréis cargando con magnitud sorpresa ¿verdad? – dijo riendo, a lo cual, yo, en lo absoluto no se la encontraba por el momento… – y así con la sorpresa que llevad vosotros hace unos segundos, el Georg al reconocerme, majo, ha tenido la misma reacción.
  • Él, él… ¿acepto quién era?
  • Ostias, tío, ¿os le ha quedado alguna otra treta para engañáis a la reportera que lo iba a entrevistar? – era lógica la respuesta de su parte, pero a pesar de eso yo tendría que seguir callando… lo que sea que aún no sea de su conocimiento lo más que pudiera hasta que me dijera que exactamente había pasado – lo único que me ha dicho fue: que no le dijera a Mariella, que queréis que lo conociera como él en verdad es, es un cabrón, y pretendéis qué no dijera yo que él sois un famoso, que al tío de verdad le interesa Mariella y no se que tantas pavadas más, pero majo vosotros decid ¿Cómo es que le interesa mi amiga? – me puse demasiado nervioso, sí, aún más, la conocía poco y los españoles tienen fama de al hablar soltar muchas malas palabras pero le dijo a mi amigo… tremendas palabrotas.
  • Yo, yo… la verdad sé muy poco básicamente lo mismo que tú, Kin y él prefiere que no sepa que es famoso por…
  • ¡Joder! Acaso pensad que Mariella le interesáis: ¿la fama?, ¿el dinero? – me miró con plétora molestia.
  • No, no. – me apresuré a detenerla con sus conclusiones – No creo que sea eso, ellos son famosos, como ya te diste cuenta con tu entrevista o lo que sea que leas en tu empresa; pero ellos viajan demasiado, estos meses ha estado muy poco aquí en Magdeburg.
  • Yo sigo, majo, sin entender el meollo – me rebatió hostilmente.
  • De acuerdo, lo único que te puedo decir es que: a él de verdad le gusto y mucho, quedo encantado con Mariella.
  • ¿Y? ¡hombre, que le diga quién es! Y santo remedio, listo; Mariella no sois tonta, ni tenéis 5 años para que le oculten las cosas, si ella os llega a enterarse por algún otro medio de quién es vuestro amigo, olvidáis de toda oportunidad alguna para con ella.
  • Lo sé, estoy conciente y créeme ayer yo lo cuestioné del porque no le había dicho nada y sobre todo de su viaje.
  • ¿Cuándo regresa el majo este?
  • El fin de semana tengo entendido – ella hacia algunas muecas – sé que puedes pensar que no es mucho tiempo, pero tal vez si o por lo menos, lo suficiente para que se haga ilusiones y las mismas que olvide, sí Georg no se pone en contacto con ella.
  • ¿Por qué decís eso? – “diablos Fabiho, debes de ser coherente” me dije recordando el encuentro del día anterior con Mariella y aquel percance que tuvimos con un chico.
  • Es fácil saber que tipo de carácter tiene ella… por lo poco… que la he tratado – Kin alzó las cejas al parecer convencida de mi escusa, la verdad es que me daba una idea que aquel chico pudo haber roto muchas cosas del corazón de Mariella y ella ahora estaría a la defensiva y sin dejarse llevar tan rápido por cualquiera por la forma en que me había dado algunos detalles del chico aquel. A comparación de Georg que desde hace mucho estaba esperando poder darse alguna oportunidad con alguien – y ustedes las mujeres seguro así como se hacen ilusiones del mismo modo las rompen. Pero volviendo al tema Georg te dijo o pidió que hicieras algo en especial.
  • Sólo me ha pedido mi numero de teléfono, que él me llamaría – alzó los hombros restándole importancia, miré el reloj eran las tres de la tarde.
  • Justo en este momento sería imposible ponernos en contacto con él, su vuelo salió hace una hora, tendremos que esperar a que él se ponga en contacto con alguno de los dos.
  • ¿Joder, y qué se supone que debéis hacer yo? No pienso mentir a mi amiga.
  • No… ehmmm… tú, ¡diablos! Odio que haga esto lo juro – exclamé llevándome las manos a la cabeza – tampoco es fácil para mi; generalmente me mantengo al margen de su vida artística y sí conoce famosas, en la fama se quedan lo mismo quiere con la gente que conoce fuera de ese ámbito.
  • No me importa… cómo se queden vuestras amistades o sus amigos los famosos, ese punto lo puedo entender, pero coño, que no le podéis mentir por mucho tiempo, yo no le quiero mentir – la situación se tornaba fea cada que pensaba si por algún motivo todo esto se viera afectada mi “amistad” con Kin.
  • De acuerdo no te enfades, hablaremos con Georg para presionarlo y que le diga como es que son las cosas…
  • La pregunta es: ¿Mariella aceptara seguir su ritmo?
  • Ahora soy yo el que no te entiende.
  • Mariella me ha admitido que le gusta vuestro amigo pero y yo podéis asegurar que ella piensa que él sois diferente, al resto de los que se ha encontrado en su camino – y volví a recordar el encuentro con ella, ahora comprendía porque la preocupación de Kin por decirle la verdad a Mariella, entre otras muchas cosas más.
  • Es una situación difícil – fue lo único que pude decirle desganado, cabizbajo y de brazos cruzados; me haya igual que ella: entre la espada y la pared por muchas razones y ni mi problema o relación o lo que fuese que sea era mía pero ambos ya estábamos inmiscuidos hasta el cuello con esto.


Después de un tanto de conversación y deliberar ambos en la incomoda situación en la que nos encontrábamos con Georg debíamos a pesar de todo esperar sus indicaciones. ¿Qué planes tenía él? ¿Por qué lo quería de esa manera?, ¿pretendía llevar más allá lo de Mariella? Yo sólo quería no perder la amistad de ambas.

Fue hasta el miércoles por la mañana que recibí otra llamada de Kin donde Georg no le había dicho mucho, la parte de ser famoso ella podría imaginarla por el trabajo que tenía, el resto aún lo reservaba para él. Nosotros no haríamos nada por el momento hasta que llegase de LA.

Al medio día y por a la llamada de Kin recordé que tenía un deber moral con el auto de él, debía llevarlo a la agencia al servicio. Llegué al departamento e hice el intercambio de autos dirigiéndome a la agencia de BMW. En la fila de registro había un auto y una camioneta delante de mí la cual se me hizo familiar pero no presté mayor interés.

Rápidamente el personal de la agencia me atendió y me aseguraban que la persona de la camioneta no tardaría; di todos los datos del auto y lo que deberían hacerle y sin más me fui a la maquinita de dulces cerca de la entrada de las oficinas, nada ahí me llamó la intención y deambulé un momento por la agencia.

  • ¡Fabiho! – una femenina voz me llamó por detrás “oh, oh”.
  • ¡Mariella! ¡qué gusto! – en cuanto la reconocí la abracé – ¿Cómo estás?
  • Muy bien muchas gracias y ¿tú? ¿Qué te trae por aquí?
  • ¡Ehmm! – “odio a Georg” pensé con premura – traje el auto al servicio – ladeo su cara hacia los autos viendo que auto era en el que venía.
  • Ese auto… no es tuyo – dijo riendo.
  • Ahmmm… sí, no, no es el mío, es de…
  • Georg – me cortó, pensé si acaso él no se había puesto en contacto con ella en estos días y si ella en ese momento pretendía que yo le dijera algo de él, las mujeres que suelen ser habilidosas para exprimirnos información a los hombres.
  • Sí, si me dijo que lo trajera… un favor… ya sabes de amigos.
  • Sí, me ha dicho que son los mejores.
  • ¡Los mejores! – repetí con sarcasmo y me quedé callado, me estaba poniendo nervioso y no sabía que más decirle.
  • Bueno, yo – dijo de igual forma sin saber que más decir – me tengo que ir, debo volver al trabajo – se acercó a mi y me dio un beso en la mejilla – me saludos a Georg – dijo.
  • ¿No se ha comunicado contigo? – “oh, oh” algo en mi cabeza rebotó.
  • Pues… no – dijo sorprendida – ¿acaso debería hacerlo?
  • No, sí… sí, no… que diga yo…
  • ¿Fabiho, por qué estás tan nervioso? – exclamó con los brazos cruzados.
  • Digamos que pensé que él te llamaría diario y cosas por el estilo…
  • Respóndeme una cosa – asentí con la cabeza – ¿Por qué traes tú, el auto de Georg?
  • ¿Por qué? porque es un favor de amigos ¿no?
  • No te creo – dijo ella y la voz en mi cabeza “¡sí! Yo tampoco” – ese chico va a terminar cayendo de mi gracia con su misterio.
  • ¡No! – grité apresuradamente.
  • ¿No? – levantó las cejas.
  • Él es un buen tipo, torpe pero buen tipo, porque no esperas a que regrese – ¡MIERDA! Peor ya no lo podía poner “Fabiho eres muy estúpido” me reprendí.
  • ¿A qué regrese? Es por eso que estás aquí con el auto – bajé la mirada y asentí – seguro se fue a sus “viajes de esos que tanto habla”
  • Ok, ¡ya! Vamos Mariella, sólo dale tiempo… te aseguro que él quiere decirte todo ¡y lo hará! – la detuve antes de que quisiera decir algo más – no lo mal interpretes, es sólo que yo no soy el indicado para decirte que pasa con su vida.
  • Entiendo, no sufras, veamos si cuando regrese es capaz de decirlo y aún más si yo tengo tiempo de escucharlo – abrí lo ojos por inercia en cuanto eso salió de su boca, me recordó lo que pensé y me dijo Kin cuando estaba con ella días atrás – ¡y! no te preocupes, lo que tienen tú y Kin no debe influir en esto; son cosas totalmente diferentes, incluso entre tú y yo. Me caes muy bien.
  • De acuerdo – no dije más y dejé que se despidiera, no sabía con certeza si la había desilusionado con mi comentario, enfadado o simplemente ya le daba igual.

4 Alas:

Karla Díaz dijo...

bien! el lenguaje de Kin quedo genial!

Anónimo dijo...

Esto se esta poniendo interesante!!!! atte..naye

OreoEffeckt dijo...

aushhhhh hahahaha
amo a Kin XD Es la ley toda astuta ella xD

Y ese Fabioh! XDD


Ya ya ya quiero el siguiente.

¿Sí, mami?

shaira beluga dijo...

ah q caray.... ese muchachito "rajon" jajajaj eso q... oye parny ingrata me cuesta leer esta letra..recuerda q habemos lectores con problemas visuales XD

ich liebe dich!